Ya han transcurrido más de 2 semanas desde la última reunión del Convenio, y seguimos sin tener noticias de la empresa para concretar una nueva reunión e intentar buscar posibles avances en la negociación.

La empresa se encuentra cómoda en esta negociación tan accidentada del Convenio Non Stop, aprovechando todas las circunstancias acontecidas, para alargar los tiempos, incumpliendo sistemáticamente el acta de inicio, donde ambas partes nos comprometimos a mantener reuniones al menos cada 15 días para dar dinamismo a la negociación.

Esta actitud contrasta con la responsabilidad y paciencia de la parte social, y a pesar de haber empezado el año con tres concentraciones con un amplio apoyo de la plantilla, se sigue apostando por el diálogo y la argumentación con datos objetivos para defender unas propuestas mayoritarias y un acuerdo que signifique una mejora en la conciliación y el descanso del Non Stop, que a su vez, redunde en una mayor contratación estable y de calidad.

El pasado 30 de marzo entró en vigor al 100% la reforma laboral, la cual entiende que la contratación temporal y la subcontratación es una lacra para nuestra sociedad. SAICA lleva años haciendo uso de estas políticas laborales, con el único interés de debilitarnos como colectivo y disminuir las condiciones de los/as trabajadores/as de todas las subcontratas que cada día trabajan dentro de las instalaciones de SAICA.

Nos encontramos en una situación con muchas incertidumbres, y lo lógico sería que la empresa apostara por un convenio de futuro centrado en las personas. La conciliación y el descanso de sus trabajadores/as y fomentar una contratación directa que le permita cumplir con la nueva legislación, debería verse de forma positiva por la empresa. Lamentablemente la actitud de la empresa parece indicarnos todo lo contrario, buscando alargar tiempos y enfrentamientos, mientras en las fábricas aumenta el desencanto de la mayoría y se aprovecha de la voluntariedad y reponsabilidad de todos/as para mantener las instalaciones a pleno rendimiento, incluso en los peores momentos.

Desde UGT esperamos un cambio real y que se puedan abrir ventanas de negociación y posibilidades reales de acuerdo, de lo contrario el bloqueo persistirá, motivado principalmente por la parsimonia y actitud de la empresa en la negociación desde el inicio de la Pandemia, lo que nos obligará a tomar medidas para defender el mejor convenio
para la mayoría.