El pasado 3 de junio la Dirección de SAICA FLEX (antigua POLIBOL) nos anunciaba un nuevo despido objetivo de un compañero con más de 20 años de experiencia en la planta.

Como ya se hizo con los compañeros despedidos en el mes de febrero, desde UGT y el Comité de Empresa se convocaron concentraciones de protesta para visibilizar la política de RRHH que el Grupo SAICA lleva adoptando desde hace casi una década basada en despedir a personas trabajadoras con experiencia y buenas condiciones para apostar por la precarización de la subcontratación y ETTs.

En este caso la Empresa, intentó camuflar el despido con una amortización objetiva del puesto de trabajo. Como no podía ser de otra manera, el compañero despedido denunció, lo que a todas luces era un despido improcedente.

El 1 de julio, en el acto de mediación, la compañía ha aceptado y reconocido otro despido improcedente abonando la indemnización correspondiente al compañero afectado.

Desde UGT queremos denunciar esta práctica del despido libre para, poco a poco, desmembrar la Empresa y deshacerse del capital humano acumulado durante tantos años; Le deseamos la mejor suerte al compañero despedido en esta época laboral y económica tan complicada.

Es necesario denunciar comportamientos empresariales de este calibre, puesto que, esta crisis sanitaria por la que estamos atravesando, ha evidenciado la importancia de las personas, por encima de otros aspectos, en la sociedad. SAICA debería entender que la mejor forma de colaborar y ayudar a conseguir una sociedad más justa y equitativa es apostar por el empleo estable con condiciones dignas, en lugar de un empleo precario.

Rechazamos y denunciamos estos comportamientos poco éticos y por no cumplir el mínimo de decoro de unas relaciones sociolaborales acordes a los tiempos actuales. Debemos recordar que en este estado de emergencia sanitaria por el COVID 19 las actividades del GRUPO SAICA fueron declaradas esenciales, por lo que, durante estos meses los compañer@s han acudido a su puesto de trabajo con la máxima dedicación y responsabilidad.

Una vez iniciado el proceso de desescalada, la Dirección de SAICA despide a uno de esos trabajadores que hace apenas unas semanas era considerado esencial: INACEPTABLE.